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Deportes Concepción celebra aniversario con triunfo ante la UdeC en el Ester Roa Rebolledo

Con un incontrolable Ojeda y el instinto de Larrivey en el área, D. Concepción superó 2-1 a una UdeC que dominó la segunda etapa, pero no le alcanzó para sumar.
Hace un mes la UdeC era el equipo sensación de la B y Deportes Concepción sacaba cuentas entre los de abajo, pero el fútbol da muchas vueltas. Los lilas ganaron 2-1 gracias a un primer tiempo de alto vuelo, de la mano de Ojeda.
El segundo tiempo fue todo auricielo, pero sin concretar. El “León” logró su tercer triunfo en línea y ahora ambos suman 10 puntos en la tabla.
El inicio fue con un equipo lila muy agresivo, que inquietó dos veces a la salida de un córner. Primero con remate de Valdivia que se elevó tras pegar en un defensa y luego un cabezazo muy en solitario de Larrivey que se fue desviado.
La UdeC amenazó con un zurdazo ancho de Molina y el “León” golpeó de vuelta con un bombazo de Ulises Ojeda a la red (19’) tras rechazo a un centro del muy activo L’Huillier. Pero con el gol, los morados se echaron atrás y el “local” empató rápidamente con pelotazo largo de Cordero, despeje a medias de Cáceres y notable mediavuelta de Iam González (28’).
Pero este “Conce” no es el de las primeras fechas, que a ratos se veía estático. Ahora se advierte mucha movilidad y clave en aquello es la tarea de Ojeda para aparecer por todos lados y descolocar al rival. A los 34’ se metió por donde juega Valdivia y sacó un buscapiernas rasante que encontró la zambullida de Joaquín Larrivey para el 2-1. El quinto gol en el torneo para un tipo que sabe jugar de “9”.
La “Nona” Muñoz sacó un contención (Cordero) y metió dos piezas ofensivas (López y Benítez) cambiando el partido. Además, los morados perdieron por lesión a su hombre más desequilibrante (Ojeda) y las ocasiones para el Campanil se sucedieron una a una.
Primero con “Nico” Araya sacando desde la línea una arremetida de López, luego un cabezazo del propio delantero en el primer palo que se fue desviado y más tarde un derechazo de Romo a las manos del arquero. Larrivey pedía la pelota más al piso, pero no se podía. La UdeC ahogaba a Concepción.
Y así Araya se hizo gigante otra vez achicando a Olivares y el propio delantero tuvo la última con un tirazo alto. Fue sufriendo, batallando y sin sobrarle nada, pero todo valió la pena para este equipo de Suárez que es otro y mete miedo. Así se cierra Collao: con 10 mil personas y la hinchada lila de fiesta.