Internacional
Trump reforma el Departamento de Justicia y revisa el caso del ataque al Capitolio
Implementó un congelamiento de contrataciones para puestos federales y revocó ofertas de trabajo en el sector.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, está impulsando una importante reestructuración del Departamento de Justicia, lo que ha generado preocupaciones entre sus aliados. Con despidos masivos y cambios internos, su enfoque parece ser una forma de tomar represalias contra los opositores y evitar el disenso. Al principio de su nuevo mandato, Trump despidió a más de una docena de abogados que participaron en casos dirigidos por el fiscal especial Jack Smith.
La fiscalía investiga las acusaciones de que Trump conspiró para manipular el resultado de las elecciones de 2020. Además, también se ha iniciado una revisión del cargo de obstrucción de un procedimiento oficial, relacionado con el ataque al Capitolio el 6 de enero de 2021.
Vale la pena recordar que Trump ya había concedido indultos a personas condenadas por sedición. Entre los cambios más drásticos está la derogación de las protecciones de seguridad para ex funcionarios que enfrentan amenazas, como Mike Pompeo y John Bolton. El general Mark A. Milley, ex jefe del Estado Mayor Conjunto, también tuvo su autorización de seguridad revocada por el Pentágono.
Además, se anularon los memorandos de la administración anterior que sugerían indulgencia en los casos relacionados con las drogas, lo que indica un cambio hacia castigos más severos. Las acciones de Trump no terminan ahí. También implementó una congelación de contrataciones para puestos federales y revocó ofertas de trabajo en el Departamento de Justicia.
Los empleados de la institución consideran que esta reorganización busca presionar a los servidores públicos de carrera para que abandonen sus cargos, creando un ambiente de incertidumbre y temor. La decisión de despojar a ex funcionarios de sus protecciones de seguridad ha provocado enojo entre algunos republicanos. Mike Pence, ex vicepresidente, expresó su decepción por esta medida.
Otros senadores, incluidos Tom Cotton y Lindsey Graham, también han expresado su malestar con la postura de Trump, lo que pone de relieve una creciente división dentro del partido sobre las políticas y el liderazgo del presidente.