Los científicos han propuesto una nueva forma de medir el tiempo

Un nuevo concepto llamado “hora local” propone una nueva forma de medir el tiempo.

El tiempo siempre ha sido una constante, aunque entenderlo y medirlo no es algo que se haya dado de forma instantánea.

Hace unos 3 millones de años, nuestros ancestros comenzaron a observar cómo la alternancia entre el día y la noche marcaba el ritmo de sus actividades diarias.

Este patrón natural se convirtió en la base para organizar su existencia y, con el tiempo, dio lugar a una percepción más estructurada del tiempo. Con el paso de los años, se desarrollaron sistemas más precisos para medir el paso del tiempo.

Desde los primeros relojes solares hasta los calendarios basados en los ciclos de la Tierra y la Luna y el reloj nuclear, estos avances permitieron dividir el tiempo en unidades manejables: días, horas, minutos y segundos, un sistema que utilizamos en la actualidad.

Pero ahora, un grupo de científicos de la Universidad Técnica Estatal Don y la Universidad NOVA de Lisboa, Portugal, ha dado un paso adelante en este tema y han propuesto una nueva forma de medir el tiempo.

De acuerdo con sus investigaciones, mencionan que el tiempo no es uniforme ni absoluto, como comúnmente se cree. En su lugar, plantean que el tiempo se comporta de manera dinámica, adaptándose a las características de cada sistema.

El tiempo podría medirse de forma distinta gracias a esta nueva idea científica

La investigación introduce el concepto de “hora local”, una forma de medir el tiempo que reconoce que no todos los sistemas experimentan el paso del tiempo de la misma manera. Según esta teoría, el tiempo puede acelerar, ralentizarse o comportarse de formas inesperadas dependiendo del entorno.

Para llegar a estas conclusiones, los científicos emplearon métodos matemáticos avanzados que les permitieron calcular de manera precisa cómo los eventos se desarrollan en un sistema particular. A través de estos cálculos, demostraron que es posible describir y predecir con exactitud el comportamiento del tiempo en contextos específicos.

Por ejemplo, la hora local podría aplicarse a fenómenos astrofísicos, como el tiempo en las cercanías de un agujero negro, donde las leyes de la física alteran el flujo temporal, tal como lo entendemos en la Tierra. También podría usarse en otros campos, como la biología o la tecnología.

Este enfoque ofrece una perspectiva más matizada sobre cómo medir el tiempo, desafiando la idea tradicional de que se trata de algo lineal y constante. Con el nuevo concepto, se abre la posibilidad de estudiar fenómenos de una forma más detallada, adaptada a las particularidades de cada sistema.

En esencia, esta investigación no invalida los métodos actuales de medición del tiempo, sino que los complementa. Permite avanzar en su comprensión y nos acerca a resolver preguntas fundamentales sobre cómo funciona realmente el tiempo en diferentes contextos.

Fuente: ComputerHoy