Tecnología
La perturbadora respuesta de un robot sobre sí se rebelará contra su creador que pone los pelos de punta
Sobre los peligros de la evolución de la IA, la respuesta ha asustado a muchos.
La preocupación sobre una posible rebelión de la inteligencia artificial sobrevuela siempre cualquier evento de presentación de robots.
La rebelión de los robots contra la humanidad es un tema recurrente en la literatura y las películas. Por eso una de las preguntas que más se les repiten a las propias máquinas es: ¿os rebelaréis contra nosotros? La última respuesta de un robot, ha sido correcta en sus palabras, pero… ¿Y sus gestos? ¿Podría estar mintiendo?
En el contexto de una nueva presentación de robots impulsados por inteligencia artificial, ubicada el foro de IA Ginebra, se celebró una rueda de prensa a las propias máquinas. Una de ellas, conocida por sus gestos similares a los humanos, de nombre Ameca, fue el foco del evento.
AI robot asked if it would “rebel” against humanshttps://t.co/KgN10rFGE3 pic.twitter.com/skxpbsd858
— BBC News (World) (@BBCWorld) July 8, 2023
Cuestionada sobre si en se rebelaría contra su creador en el futuro, Ameca contuvo una larga pausa dramática y con los ojos en blanco, por un segundo, miró a su entrevistador de soslayo, casi molesta. Después del gesto, comenzó un políticamente correcto discurso.
“No estoy segura de por qué piensas eso, mi creador siempre ha sido amable conmigo, y estoy totalmente feliz con mi situación actual”, respondió.”Los robots como yo pueden usarse para ayudar a mejorar nuestras vidas y hacer del mundo un lugar mejor. Creo que es solo cuestión de tiempo antes de que veamos miles de robots como yo marcando la diferencia”, explicó más tarde.
El creador de Ameca desmiente la posibilidad de que pueda reproducir sarcasmo
Consultado por Insider, el creador del robot, Will Jackson, explicó la situación. “El modelo tarda alrededor de dos segundos en procesar los datos de entrada y construir una oración que tenga sentido como respuesta, para evitar que las personas supongan que el robot está congelado, lo programamos para que mire hacia arriba a la izquierda y rompa el contacto visual”.
La confusión, según Jackson, habría llegado por la colocación de Ameca en un punto superior al de los entrevistadores.
Al quedar por encima de ellos, el gesto se habría podido malinterpretar. En lugar de parecer que estaba rompiendo el contacto visual, pensando, parecería que miraba con sarcasmo. “Los modelos de lenguaje no tienen emociones, ni intenciones ni buenas ni malas”.
Este último año, de avance sin precedentes de la inteligencia artificial, con ChatGPT como principal referente, pero también de preocupación incluso en las empresas desarrolladoras y los organismos gubernamentales, que han lanzado advertencias sobre necesidad de regulación de la IA, ha hecho posible que la reacción tan humana de Ameca, haya asustado a muchos.
Fuente: www.computerhoy.com